Se trata de un documento exhaustivo donde se recogen las necesidades de los productores, así como las principales actuaciones a acometer para la modernización de las infraestructuras actuales
La Consejería de Agricultura, Ganadería y Pesca del Gobierno de Canarias, presentó en la mañana de hoy, jueves 30 de marzo, en la sede de Presidencia del Gobierno en Santa Cruz de Tenerife, un exhaustivo estudio de cada una de las islas que permite esbozar un mapa general de la situación actual de las infraestructuras de regadío y que define las posibles actuaciones para la mejora y ampliación de los sistemas hídricos de cada una de las islas.
La consejera de Agricultura, Ganadería y Pesca del Ejecutivo autonómico, Alicia Vanoostende, detalló al sector los puntos más relevantes del estudio de regadíos, elaborado por Gestión del Medio Rural de Canarias (GMR Canarias), con el objetivo de mejorar la eficiencia de los actuales regadíos, avanzando en una gestión del agua más eficiente y sostenible
Entre las actuaciones que figuran en el ‘Diagnóstico de la eficiencia de las infraestructuras de riego, así como los requerimientos de obras de regadío en Canarias’, Vanoostende destacó la ampliación y modernización de las redes de riego, de las estaciones desaladoras de agua, así como la construcción de nuevos embalses y depósitos, mejoras técnicas en los sistemas de bombeo, o la implantación de nuevas tecnologías
La consejera del Ejecutivo autonómico, explicó que la elaboración del estudio ha sido muy participativa, “ya que hemos mantenido reuniones con los diferentes agentes sociales (comunidades de regantes, cámaras insulares de agua, etc), así como con el personal de los consejos insulares de aguas y de los departamentos con competencia en Agricultura y Aguas de cada cabildo insular”.
“En base a sus demandas y necesidades, hemos especificado una serie de actuaciones a acometer, priorizando aquellas de mayor urgencia, teniendo en cuenta el cambiante escenario al que se enfrenta Canarias con los efectos del cambio climático y la escasez de lluvias”, indicó.
Para Vanoostende “en una región de escasos recursos hídricos, como es el caso de Canarias, donde los estudios hidrogeológicos indican que en varias islas la extracción de los acuíferos supera la recarga de los mismos, el uso racional de los recursos disponibles es de la máxima prioridad”.
Por ello, incidió en la necesidad de lograr un uso eficiente y sostenible del agua que, a su vez, garantice la distribución a todas las comunidades de regantes, productores y por supuesto, a la ciudadanía en general. “Es cierto que esta necesidad cobra mayor importancia en el sector agrícola, que depende del agua para su conservación y desarrollo”, aclaró.
“Por este motivo, hemos hecho especial hincapié en un mayor ahorro, tanto del agua como de la energía, ya que el plan contempla la implantación de métodos de riego a presión, aspersión o localizado, la mejora en la gestión de la red (lo que se refleja en un mayor control del consumo de agua), así como la simplificación de la administración del recurso, permitiendo ahorro y evitando los vertidos al mar”, añadió.
Los trabajos realizados por GMR Canarias han supuesto un gasto plurianual de más de 458.000 euros, distribuidos en 139.616 euros para 2021 y 319.140 para 2022, financiados con fondos propios de la Comunidad Autónoma de Canarias.